Cada día, la cantidad de casos de violencia domestica reportados es exorbitante. El abuso emocional generalmente precede a la violencia domestica, sin embargo rara vez se discute al respecto. Hombres y mujeres abusan unos de otros y, desafortunadamente, muchas veces sin darse cuenta.
¿Por qué el abuso emocional es tan difícil de reconocer?
El abuso emocional muchas veces pasa desapercibido debido a que puede ser muy sutil, ademas los abusadores suelen culpar a sus víctimas. Pueden aparentar no tener idea de por qué estas enojadx. Otro factor importante por el cual esta situación puede pasar desapercibida es porque, quizá, lo has vivido en relaciones pasadas de tal forma que lo veas, inconscientemente, como algo normal. Con el paso del tiempo, tu autoestima se verá sumamente disminuida a casi el mínimo causando culpa en ti, empezarás a dudar de ti mismx y de tu percepción de la realidad.
Otros aspectos que pueden favorecer la dificultad para reconocer una situación de abuso emocional es que la persona que lleva a cabo el abuso puede ser amoroso en muchas otras situaciones, logrando así que los abusos pasen a segundo termino o se «olviden», perdiendo así importancia; si acaso has vivido abuso emocional en relaciones pasadas, dificilmente podrás tener un punto de comparación para darte cuenta de tu situación actual; si el abuso tiene lugar en la privacidad de la pareja, seguramente no habrá terceras personas que validen tu experiencia, es aquí donde también puedes llegar a dudar que existe abuso en tu relación.
La personalidad de un abusador
El abusador generalmente va a querer controlar y dominar. Para esto, se ayudan del abuso verbal. Son personas egocéntricas, impacientes, poco razonables, intensos, rencorosos, carecen de empatía y la gran mayoría de las veces son personas celosas, desconfiadas y posesivas. Para poder mantener el control, algunos abusadores pueden «tomar rehenes», por lo que generalmente tratarán de aislar a su víctima de su familia y amigos. De forma frecuente y constante cambian de ser divertidos, amorosos y románticos a estar enojados (sin que necesariamente se trate de un trastorno de tipo bipolar). Algunos «castigan» con enojo (gritos), otros con silencio (forma pasiva de agresividad), o ambos.
¿Sufres abuso emocional?
El abuso emocional puede comenzar de forma inofensiva y llegar a crecer en medida que el abusador adquiere certeza de que no dejaras la relación. Quizá no comience sino hasta haber un compromiso formal, matrimonio o embarazo. Si miras hacia atrás, probablemente puedas ahora ver las señales siempre presentes de control o celos. Quizá eventualmente aprendas a funcionar de forma cuidadosa para no molestar a tu abusador. Estar sujetx a abuso emocional por mucho tiempo puede desencadenar ansiedad, estrés postraumático, depresión, poco deseo sexual, dolores crónicos u otros síntomas físicos.
Muchas personas permiten el abuso por temor a la confrontación con el abusador. Usualmente han adoptado un rol de cuidadores o son muy complacientes. Suelen sentirse culpables. Algunas personas que sufren abuso no son capaces de contactar con su enojo siquiera para poder enfrentar al abusador; lanzan argumentos carentes de fundamento, se culpan a si mismos, sin embargo no son capaces de poner limites saludables a su abusador.
Si acaso estas permitiendo el abuso en tu relación, hay una gran posibilidad de que hayas sufrido abuso en relaciones interpersonales en el pasado, aunque no lo reconozcas como tal. Quizá lo viviste en forma de un padre estricto o alcohólico, una madre invasiva o un hermano burlón. Sanar del abuso implica comprender de qué forma has sido abusado, perdonándote a ti mismo y reconstruir tu autoestima y autoconfianza.
Si al leer las líneas anteriores, te preguntas si estas viviendo una relación con abuso emocional, probablemente así sea. El abuso emocional, a diferencia del abuso físico (empujones, jalones, golpes, romper o tirar cosas), consiste en palabras o acciones que denigran, controlan, castigan o manipulan. Condicionar el amor, la comunicación, incluso el dinero son formas indirectas de control que también se traducen en abuso emocional. La conducta pasivo-agresiva es hostilidad encubierta. El agresor pasivo es un «lobo vestido de oveja». (En los próximos días escribiré sobre como responder a una persona pasiva-agresiva).
El tema del abuso emocional es bastante extenso. En la segunda parte de este artículo escribiré sobre los tipos más comunes de abuso emocional. Hasta pronto.
Sexólogo y psicoterapeuta humanista de individuos adultos, parejas y grupos desde el 2015.
Formación en terapia Gestalt y Eneagrama, especialista en educación de la sexualidad y maestro en Sexología.
Hago talleres de sexualidad y desarrollo personal en Casa Revuelta.
Tengo un matrimonio de mi historia años y casi desde que recuerdo e vivido con este tipo de abuso del que habla por parte de mi pareja al grado de ya afectar mi salud no se como arreglar o por error un límite a esta situación ,el siempre pude perdón y yo vuelvo a perdonar y a aceptar pero solo dura bien 2 o 3 días y vuelve el problema, le dije que fuéramos a terapia y el acepto pero tengo miedo pues ya no creo que cambie algún día y vuelva a ser lo mismo.
Hola, gracias por compartir tu caso. Por el patrón de conducta que mencionas en tu pareja, no puedo yo asegurarte que tu pareja vaya a cambiar en un futuro, ni siquiera la psicoterapia puede «hacerlo» cambiar si el no lo quiere hacer realmente. Sin embargo, sí te puedo decir que si hay una disposición de parte de el para acudir a terapia, quizá haya una buena oportunidad para el cambio. Más allá de esto, te sugiero que revises si tu misma estas dispuesta a dejar ir el daño que te ha causado y si realmente vale la pena para ti seguir en una relación así. Saludos