En la práctica clínica llegan a consulta todo tipo de parejas con diferentes tipos de problemas o situaciones que se salen de control. Una de las preguntas que mas escucho es: ¿puede ayudarnos a salvar la relación? y mi respuesta casi siempre es la misma: "depende de lo que ustedes decidan". 

Lo cierto es que no en todos los casos es posible rescatar la relación. Cuando el vínculo que genera la relación esta muy lastimado por eventos cotidianos de parte de uno de los miembros o ambos es prácticamente imposible seguir juntos -mientras la persona afectada no decida lo contrario- y entonces resulta conveniente el apoyo del terapeuta para salir de la relación de la manera mas sana posible para ambos. 

A veces el éxito de la pareja esta en saber decir adiós!

Y es por eso que quiero compartir un poco de lo que implica el decidir si lo mas conveniente es separarse, divorciarse y que tan relacionadas están estas opciones con el hecho de decidir asistir a terapia de pareja. 

1Para empezar, como ya mencione al inicio de este artículo, el hecho de que los dos miembros de la pareja decidan asistir a terapia de pareja no garantiza que la relación se mantenga. Uno de los beneficios de la psicoterapia es que el paciente empezará a darse cuenta de muchos patrones de comunicación y/o conducta propios y de la pareja y es precisamente en esta parte donde se puede llegar a decidir (en ocasiones mucho antes) si lo mejor es continuar con la relación o terminarla. 

En ocasiones uno de los miembros, al darse cuenta de su situación, decide hacer algo positivo para si mismo con eso que se acaba de dar cuenta, puede decidir mantenerse igual en su propia asertividad o puede decidir cambiar lo que no le conviene seguir haciendo y entonces mejora la relación. La situación se vuelve un poco mas complicada, ya que no es solo el o ella quien se esta dando cuenta de nuevas cosas, también la pareja lo esta haciendo. Es entonces cuando, de no estar de acuerdo respecto a lo que cada quien quiere hacer con eso que se han dado cuenta, cada uno de los miembros puede llegar a decidir que lo mejor es seguir cada quien su camino. 

Algunas veces me preguntan por teléfono al llamar para hacer una cita si les recomiendo asistir como pareja o de manera individual y mi respuesta siempre es: "si los dos están dispuestos a generar cambios para el bien de la relación, vengan en pareja"; a lo que casi siempre me responden: "es que la verdad yo ya me quiero separar, pero no quiero arrepentirme después por una mala decisión"

2Lo cierto es que si se presenta cualquier situación que la pareja no pueda resolver con sus propios recursos emocionales, es necesario acudir a terapia; sea una diferencia de opiniones hasta una situación de desconfiaza o infidelidad. 

3La función del terapeuta podrá ser, dependiendo cada caso particular, desde ayudar a negociar una incompatibilidad de criterios para tomar una decisión, hasta brindar recursos emocionales extra para que la separación sea lo mas sana posible.

4Quizá estés pensando: "si voy a separarme de mi pareja de años porque ya no me soporta, ¿cómo carajos podrá ser sana la separación? me va a doler demasiado y no creo poder soportarlo". La cuestión es que, si definitivamente no hay manera de recuperar la relación, vas a aprender a desprenderte con muy poco dolor de esa relación dañina para ambos. Una separación sana implica la aceptación de ambos miembros de la pareja de que ya no hay nada que se pueda rescatar para salvar la relación. Y en base a esa aceptación hacer el compromiso (con todo lo que este implica) de separarse uno del otro sin ninguna intensión deliberada de lastimar o fregar al otro.

5También es común que los miembros de la pareja no estén de acuerdo en lo que quieren para su relación y sus expectativas hacia la terapia pueden ser muy distintas entre si. La terapia de pareja, como el mismo termino lo señala, es para la pareja. Si uno de los dos miembros no esta de acuerdo en acudir a terapia o simplemente no reconoce que hay un conflicto en su relación es imposible hacer terapia de pareja. Esto no quiere decir que todo este perdido, simplemente el cambio va a ser mas lento y se necesitara mucha paciencia por parte del miembro que decide recibir el apoyo del terapeuta.

Mi recomendación es que si son una pareja joven o que recién comienza, traten de identificar las pequeñas diferencias que se presentan ahora que ya están juntos y que muy posiblemente no habían notado durante el noviazgo y hablen claramente sobre lo que les incomoda; aun si se trata de una relación formal de noviazgo es importante aprender desde el comienzo a comunicarse asertivamente. 

Si tú y tu pareja ya tienen algunos o muchos años juntos y no saben cómo cambiar la manera en que se han estado comunicando y comportando, antes de siquiera pensar en la separación busquen ayuda profesional. Ir a terapia no significa que están locos o que su situación no tiene otra salida.

psicologo en tijuana

Psic. Orlando Pérez

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