Procrastinación, ¿Cómo dejar de posponer mis decisiones?

Procrastinacion es la acción o el hábito de postergar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables.

Algunas veces es normal postergar algunas cosas, pero hay personas especialistas en postergar, son aquellas que se comportan así de manera continuada porque de alguna forma creen que el día de mañana será más adecuado para llevar a cabo una o varias tareas que tienen pendientes. Pero en realidad la procrastinacion es un problema de mala regulación y pésima organización del tiempo. Quien pospone o procrastina lo que está realizando en el fondo es una conducta claramente evasiva.

Las situaciones de la vida que más habitualmente son objeto de procrastinacion en algún momento son:

• Las tareas del día a día: ir a comprar, limpiar la casa, planchar, hacer las maletas para un viaje, ir al médico, cortarnos el pelo, etc.
• El cuidado personal: lo típicos propósitos de cada año nuevo: dejar de fumar, hacer más ejercicio, hacer dieta, realizar mayor formación para mejorar en el trabajo, etc.
• Los compromisos con los demás: no resolvemos conflictos de pareja, dejamos para el último día preparar una fiesta de aniversario, aplazamos el hecho de dedicarle más tiempo personal a nuestros hijos, etc. pero también en el trabajo hay procrastinacion cuando no nos preparamos para una reunión o dejamos las tareas para el último momento.

Todo esto provoca en quien realiza la procrastinacion sentimientos de insatisfacción, inseguridad, inferioridad y estancamiento. Como consecuencia, además, se termina perdiendo la confianza y el respeto de los demás.

Algunos dicen que las autodudas (no confiar en mis propias capacidades), junto con la baja tolerancia a la tensión, son las raíces de las conductas de postergación y evitación.

La autoduda es el reflejo de un proceso autodestructivo. Ocurre cuando juzgo mis habilidades como deficientes o inadecuadas. Por ejemplo, si me digo a mi mismo: “Yo soy muy lento para escribir”, estoy diciendo que la conducta adecuada sería escribir rápido. De este modo, estoy haciendo una valoración negativa de mi mismo. Por ese motivo, si he llegado a la conclusión de que soy muy lento para escribir; y no obstante necesito redactar un informe, entonces me voy a poner tenso, ansioso, y probablemente lo voy a postergar, diciéndome: “Como soy muy lento, mejor lo hago mañana”.

Por otro lado, la procrastinacion por baja tolerancia a la tensión tiene lugar cuando tiendo a sobreactivarme en términos emocionales, conductuales y cognitivos (pensamientos). También en aquellas ocasiones en que mis metas se hacen difíciles de lograr o cuando existe algún tipo de obstáculo o bloqueo en mis logros.

Si algo me produce tensión o irritación, como por ejemplo conducir con mucho tráfico, prepararme para un examen, las discusiones de pareja, etc. centraré toda mi tensión en ese acto, por el que voy a sentirme muy estresado, ya que magnifico la importancia negativa de mis sentimientos. Por ese motivo, simultáneamente intentaré neutralizarlos. ¿Cómo? Procurando poner fin a la tensión que estaba experimentando en ese momento, evitando o procrastinando.

Con lo anterior quiero decir que la procrastinacion es un habito, y como tal conviene empezar a practicar la conducta opuesta para que el habito empiece a cambiar. En la medida en que decidas dejar de postergar pequeñas cosas y las hagas, será a medida en que poco a poco dejarás de hacerlo. Se escucha muy fácil, ¿cierto?

La realidad es que no es tan sencillo, es conveniente revisar constantemente mis pensamientos para darme cuenta en qué momento estoy postergando algo por las razones inapropiadas y entonces hacer algo con ello. Si algo de lo que has leído hasta aquí tiene sentido para ti y te identificas con esta situación, te invito acudir a terapia para poder realizar un cambio de raíz.