La terapia sexual se enfoca en situaciones que pueden tener una influencia desfavorable en la respuesta sexual humana, produciéndose algunas alteraciones.
Buscamos erradicar esas barreras y bloqueos que nos desconectan del placer. Es un proceso, lo que significa que hay una secuencia particular de intervenciones que brindan la posibilidad de relacionarnos con el placer con más consciencia.
Muchas veces pensamos que solo estando en pareja podríamos acudir a una terapia sexológica, sin embargo, todos podemos acudir puesto que somos poseedores de una sexualidad individual y cada uno, con o sin pareja, somos responsables de la manera en que la vivimos.
La consulta sexológica es, entonces, para cualquier persona que esté interesada en adquirir una visión renovada de su sexualidad.
¿La terpia sexual es para mi solo/sola o en pareja?
Cuando se presentan disfunciones de la vida erótica estando en una relación monógama, me gusta invitar a ambas personas a asistir a la consulta, ya que esto brinda un espacio seguro donde la pareja puede comunicar con más libertad lo que cada quien necesita para disfrutar.
Además, podemos esclarecer las dudas que aparecen respecto a las actividades sugeridas a realizar en la semana. Y que, si bien entiendo que hay cosas que no queremos contarle a nuestra pareja, cuando decidimos que la sexualidad es algo que se atiende en individual y que es mejor que la pareja no sepa "algunas cosas", es muy probable que haya otras cosas y de mayor trascendencia que una disfunción sexual.
Hay ocasiones en que una persona en una relación monógama viene a consulta porque su pareja le ha dicho que "tiene que arreglar su problema". En estos casos suele ser muy difícil la integración de la pareja al tratamiento, por lo que se puede trabajar muy bien en individual.
Otra excepción a la recomendación de acudir en pareja es cuando uno de los integrantes acude para mejorar sus habilidades y desempeño sexual para sorprender a su pareja, y entonces sesión a sesión les voy enseñando nuevas maneras de vivir su sexualidad mientras les acompaño a gestionar algunas inseguridades que puedan presentarse ante la exploración sexual.
También hay ocasiones en que alguna vivencia de nuestra sexualidad nos genera culpa, en terapia sexual podemos aprender a relacionarnos de maneras más amigables con nuestra sexualidad y tener mayor consciencia y convicción en los límites que nos ponemos, así como a ser responsables de las decisiones que tomamos al expresar nuestra sexualidad.
¿En qué casos se puede acudir con un sexólogo?
Se podría pensar que es necesario presentar alguna disfunción sexual para acudir con un sexólogo. Sin embargo, la asesoría sexológica es bastante útil en la prevención de las mismas, ya que muchas disfunciones son influenciadas por la educación en sexualidad que recibimos.
También hay inseguridades que dificultan la vivencia de una sexualidad placentera. Hay muchos hombres que acuden a consulta sexológica porque sienten inseguridad por el tamaño de su pene, o su autoestima sexual no les permite sentirse atractivos para otras personas. O mujeres que no se sienten buenas amantes y quieren aprender a disfrutar y complacer a su pareja. Para esto, la terapia sexual se enfoca en reforzar la percepción positiva del cuerpo y del placer.
Hay mujeres que nunca han experimentado un orgasmo y en terapia sexual pueden descubrir los bloqueos que las alejaban del placer, además de relacionarse de maneras más positivas con su placer y explorar con seguridad diferentes estímulos que les faciliten disfrutar consigo mismas o con otras personas.
Así como personas adultas de diferentes edades que nunca han vivido un encuentro erótico con otra persona, descubren en terapia eso que no les ha permitido compartirse con los demás o pueden aprender que la sexualidad compartida es una decisión y a veces está bien decidir no vivir una sexualidad activa.
Por otro lado, personas y parejas con interés en explorar formas no convencionales de relacionarse como relaciones abiertas, poliamor, estilo de vida swinger y otras, encuentran en terapia sexual un lugar donde pueden cuestionarse y atender las desavenencias que se llegan a presentar en sus relaciones sexoafectivas.
En resumen, la terapia sexual es útil para aprender a relacionarnos mejor con el placer y con las demás personas, así como atender diferentes disfunciones sexuales.
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