Mindfulness y Gestalt: conectando con el presente

En la sociedad actual vivimos en un mar de información y rodeados de distractores.

El ritmo de vida diario suele llevarnos a un estado de distracción constante. Nos cuesta focalizar, saltamos de una cosa a otra continuamente, miles de estímulos luchan por captar nuestra atención: el celular, un correo que entra, anuncios, etc.  Según las estadísticas, como máximo pasamos unos once minutos de media concentrados en una actividad, antes de que algo o alguien nos interrumpa. Incluso si no existen distractores somos nosotros muchas veces quienes nos desconectamos y nos ponemos a pensar o hacer otra cosa.

Cada vez es más complicado mantener la capacidad de concentración, estar atentos al ahora o a la actividad que estamos realizando es este instante. Disfrutar del presente es cada vez más difícil. ¿Has tenido la impresión alguna vez de hacer cosas en piloto automático sin ser consciente de ello? Suele pasar. Por ejemplo: comemos mientras miramos la tele y no disfrutamos de la comida, o estamos pensando en lo que hemos de hacer en el trabajo mientras vamos caminando por el parque y no disfrutamos del paseo, etc.

Recuerdo con gran admiración el relato de Patricia Baumgardner, discípula de Fritz Perls estando en el instituto Esalem, donde se solidifico la practica de la psicoterapia Gestalt.

Estando ella en su cabaña, Fritz toca a su puerta para invitarla a dar un paseo recién caída la noche. Ella lo toma del brazo y emprenden su paseo. Patricia comienza a platicar sobre la experiencia que ha vivido en el campamento, sobre sus proyectos al regresar a la ciudad, etc. de momento se da cuenta que Fritz no dice nada, no la escucha; el solo está dando un paseo con ella, el está.

Y tú, ¿vives en el presente o en la fantasía del futuro y el recuerdo de lo pasado?