Siguiendo estos consejos podrás sacar el máximo provecho a la terapia de pareja.

¿Alguna vez te has preguntado si la terapia de pareja puede ayudarte a ti y a tu pareja a resolver un conflicto, a aprender a comunicarse mejor, o incluso a llegar a un nivel superior en sus relaciones íntimas?

Este tipo de terapia puede conseguir todo esto, pero sólo si evitas las trampas y los obstáculos que tú o tu pareja se pongan.

Aquí te dejo seis claves para hacer que la terapia de pareja funcione.

1. No esperes demasiado tiempo

En mi trabajo como terapeuta de parejas, no es raro que uno de los miembros de la pareja diga que ya habían consultado a un abogado sobre su divorcio.

Incluso, a veces los dos miembros de la pareja han contratado los servicios de un abogado. Pareciera que quieren decir que ya lo han intentado todo, pero en realidad ya han tomado una decisión y quieren dejar la relación. En tal situación la terapia de pareja posiblemente esté destinada a apoyar su decisión y que los daños colaterales sean mínimos. Las parejas tienen más y mejores posibilidades de arreglar su relación si abordan el problema desde el principio.

2. Encuentra un terapeuta adecuado

Asegúrate de hacer tu parte del trabajo y acude a un terapeuta con experiencia en terapia de pareja. Un terapeuta de pareja cuenta con muchas habilidades específicas.

3. Sean sinceros con el terapeuta

Es muy complicado trabajar con parejas cuando uno, o los dos miembros, no dicen la verdad. Como mencioné antes, a veces ya han consultado a un abogado sobre su divorcio y no son honestos sobre este tema. En otras ocasiones hay asuntos como aventuras extramatrimoniales, que están implicados en los problemas pero mantenidos en secreto.

Otra área que se oculta con frecuencia es él de abuso de sustancias, ya sea droga, alcohol… Un buen terapeuta no va a juzgaros, pero ha de saberlo todo para poder ayudar.

4. Esten presentes en las sesiones

Tanto literalmente como en sentido figurado. En primer lugar, sean puntuales en la consulta del psicólogo y dispuestos a participar. Apaguen o guarden los teléfonos. Esto puede parecer obvio, pero en realidad he tenido que decir a mucha gente que guarden su teléfono en medio de una sesión.

Participar de forma activa en la sesión. Hagan todo lo posible para escuchar, compartir, y mantener la mente abierta.

5. Hagan sus tareas

Algunas terapias de pareja requerirán trabajo adicional entre sesiones. Puede que les pidan que contesten algún cuestionario sobre su relación de pareja. Puede que les pidan que practiquen las habilidades de comunicación. También es posible que haya material de lectura.

Esto suena quizá muy cansado, y la verdad es que en cierto modo lo es, ya que estarán aprendiendo nuevas habilidades de relación. Aunque suene un tanto ilógico, lo cierto es que sacaran de la terapia de parejas lo que pongan en ella.

6. Den tiempo al tiempo

Las parejas a menudo quieren resolver problemas que han aumentado a lo largo de los años, y quieren hacerlo rápidamente una vez que se deciden a pedir ayuda. Pero cuanto más tiempo pasa desde que comienzan los problemas es mayor el resentimiento.

No esperen que la terapia de pareja haga efecto por arte de magia de la noche a la mañana. Tampoco esperen que el terapeuta descubra sus problemas. Un buen terapeuta actuará más como un conductor de la relación. Si a la vez que el terapeuta hace su trabajo ustedes hacen el suyo, hay esperanza que puedan llegar a recordar las cosas buenas que los unieron en un primer momento.

Si haz pesado en acudir a terapia de pareja y quieres consultarte conmigo, puedes hacer CITA AQUI

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Psic. Orlando Pérez

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