El deseo sexual se refiere a esa intensa necesidad de disfrutar del placer erótico, una sensación que muchas veces se describe como estar “cachondo”. Es importante aclarar que este deseo es algo propio; no siempre implica la presencia de otra persona. Aunque puede ser estimulado y dirigido hacia alguien específico, en un momento particular o en un lugar determinado, la esencia del deseo sexual radica en nuestra propia experiencia interna.

 Diversos factores influyen en nuestro deseo sexual, y la educación que hemos recibido sobre sexualidad es uno de los más significativos. Desde pequeños, absorbemos mensajes sobre lo que se considera apropiado o inadecuado en términos de deseo y placer. Muchas de estas enseñanzas sociales nos dictan cuándo, con quién y en qué contextos “deberíamos” sentir deseo. Esto puede crear barreras que dificulten nuestra conexión con nuestro propio deseo.

Si te has dado cuenta de que experimentas alteraciones en tu deseo sexual, un primer paso útil es reflexionar sobre las ideas y creencias que has adquirido a lo largo del tiempo. Pregúntate: ¿Qué mensajes sobre el deseo he interiorizado? ¿Me siento cómodx con mi sexualidad? Este proceso de autoconocimiento puede ser enriquecedor y, en muchos casos, el acompañamiento de un especialista en salud sexual puede ser de gran ayuda.

En ocasiones, puede que desees estar más cerca de tu pareja o anhelar momentos de intimidad, pero sientes que “no te nace”. Aquí es donde es útil diferenciar entre los tipos de deseo. El deseo espontáneo se manifiesta como una respuesta a estímulos inesperados, mientras que el deseo responsivo surge después de un estímulo intencionado. Ambos tipos de deseo son válidos y pueden coexistir en nuestra vida sexual.

Una estrategia efectiva para reconectar con tu deseo sexual es experimentar diferentes estímulos que despierten tu interés. Esto puede incluir explorar nuevas actividades, mejorar la comunicación con tu pareja o incluso dedicarse tiempo a uno mismo para entender mejor lo que se desea.

Si sientes que te cuesta trabajo acceder a tu deseo, no dudes en buscar la ayuda de un especialista. Un profesional puede ofrecerte herramientas y perspectivas que faciliten tu conexión con tu sexualidad, ayudándote a vivir una vida erótica plena y satisfactoria.